Contenidos
- 1 ¿Qué es Mercedes-Benz ELF y para qué sirve?
- 2 Principales innovaciones del Mercedes-Benz ELF
- 2.1 Carga dual ultrarrápida: recargar 100 kWh en 10 minutos
- 2.2 Carga bidireccional: una nueva manera de entender y reaprovechar la energía eléctrica
- 2.3 Carga solar integrada: hacia una recarga eléctrica más inteligente y sostenible
- 2.4 Carga inductiva y conductiva: recargar sin cables, de forma automática y con la máxima comodidad
- 2.5 Recarga robotizada: minimizar riesgos para aumentar la seguridad del usuario
- 3 La ‘cuenta de energía virtual’: reaprovechar la electricidad generada en casa
- 4 Beneficios del Mercedes-Benz ELF
En las últimas dos décadas, los sistemas de recarga eléctrica han experimentado notables mejoras, pasando de ser lentos, costosos y poco interoperables a integrarse en un ecosistema global inteligente, rápido y conectado.
Sin embargo, a pesar de que se ha avanzado mucho, los fabricantes automotrices siguen innovando y desarrollando nuevas soluciones para que los vehículos eléctricos puedan electrorepostar más energía en menos tiempo. En este contexto, Mercedes-Benz ha presentado recientemente la Mercedes-Benz ELF, una furgoneta-laboratorio de carga experimental que abre grandes posibilidades para recargar los vehículos de baterías de forma más rápida y eficiente. En este artículo de Wikidriver te contaremos las características de este innovador laboratorio sobre ruedas y el impacto que podría tener en la movilidad eléctrica.
¿Qué es Mercedes-Benz ELF y para qué sirve?
Cuando pensamos en un laboratorio, lo habitual es imaginar un espacio interior, estático y repleto de tecnología de vanguardia. Sin embargo, equipado con cuatro ruedas, también puede transformarse en un banco de pruebas móvil al aire libre. Es lo que ocurre con la Mercedes-Benz ELF, la furgoneta-laboratorio que la marca alemana ha desarrollado recientemente para experimentar con nuevas soluciones y mejorar la infraestructura de carga de sus vehículos eléctricos.
Tal como indican sus siglas en alemán (Experimental Lade Fahrzeug, es decir, vehículo de carga experimental), el ELF es un laboratorio móvil que combina distintos sistemas de carga: ultrarrápida, bidireccional, solar, inductiva y conductiva. ¿Su objetivo? Mejorar la infraestructura de carga de alto rendimiento para democratizar el uso del vehículo eléctrico y acelerar la transición hacia los vehículos pesados de baterías, como camiones y furgonetas de gran tamaño.
Principales innovaciones del Mercedes-Benz ELF
Seguidamente, analizaremos las principales innovaciones del vehículo experimental de Mercedes-Benz que podrían revolucionar el futuro de la movilidad eléctrica.
Carga dual ultrarrápida: recargar 100 kWh en 10 minutos
En veinticinco años, los sistemas de recarga eléctrica han pasado de ser lentos en el año 2000, a rápidos entre 2010 y 2020 y, en los últimos cinco años, a convertirse en ultrarrápidos. Sin embargo, siempre hay margen de mejora y Mercedes-Benz ha colaborado con Alpitronic, líder europeo en tecnología de carga de alta potencia, para desarrollar una nueva generación de cargadores ultrarrápidos. Fruto de esta alianza, ambas compañías han desarrollado el Concept AMG GT XX, un prototipo de estación de carga de alto rendimiento capaz de transmitir corrientes de hasta 1.000 amperios en condiciones reales a través de un cable CCS (el estándar de carga rápida más extendido del mundo para vehículos eléctricos), el doble de lo que permitían los sistemas anteriores.
Para hacerlo posible, han adaptado una estación MCS (Sistema de Carga de Megavatios) —originalmente diseñada para vehículos eléctricos de gran tamaño como camiones, autobuses o furgonetas de transporte pesado—, consiguiendo aumentar su potencia y tiempo de carga hasta acercarlos a los de un repostaje convencional. ¿Y cómo lo han logrado? Sustituyendo el cable pesado que se utiliza con los sistemas MCS por un cable CCS optimizado. Gracias al binomio MCS+CCS, el laboratorio sobre ruedas ELF puede alcanzar una capacidad de carga de hasta 900 kW, permitiendo repostar 100 kWh en tan solo diez minutos. Esta doble investigación en los sistemas CCS y MCS no solo permite a Mercedes-Benz avanzar en la tecnología del futuro, sino también mejorar la infraestructura de recarga actual aplicando soluciones ya listas para su producción.
Carga bidireccional: una nueva manera de entender y reaprovechar la energía eléctrica
Otra de las novedades de este innovador prototipo de carga es que permite la carga bidireccional, una tecnología que transforma el vehículo eléctrico en una batería móvil capaz de almacenar, utilizar y devolver energía.
Como su nombre indica, la carga bidireccional posibilita que el suministro eléctrico circule en dos direcciones: de la red eléctrica hacia el vehículo y de este hacia multitud de dispositivos, edificios (como nuestra propia vivienda) y hacia la red gracias a la tecnología Vehicle-to-Everything (V2X).
De esta manera, el Mercedes-Benz ELF permite la carga bidireccional en los dos tipos de corriente, AC (corriente alterna) y CC (corriente continua):
- AC: permite suministrar electricidad a distintos dispositivos (Vehicle-to-Load, V2L) y devolverla a la red doméstica (Vehicle-to-Home, V2H), a la del edificio (Vehicle-to-Building, V2B) o a la red eléctrica pública (Vehicle-to-Grid, V2G) gracias a un cargador Wallbox bidireccional.
- CC: permite recuperar energía mediante un cargador Wallbox bidireccional y devolverla a la red eléctrica pública, la red doméstica o la del edificio.
Carga solar integrada: hacia una recarga eléctrica más inteligente y sostenible
El ELF de la marca alemana es también un vehículo solar: dos paneles solares instalados en el techo de la furgoneta-laboratorio permiten transformar la energía solar en eléctrica para alimentar la batería y el motor del vehículo. De nuevo, gracias a la carga bidireccional, el exceso de energía solar acumulado se almacena temporalmente en la batería de alto voltaje para su uso posterior en la vivienda.

Carga inductiva y conductiva: recargar sin cables, de forma automática y con la máxima comodidad
Mercedes-Benz ha apostado por los sistemas de carga inductiva y conductiva en su vehículo experimental para permitir y automatizar la carga inalámbrica, por un lado, y disminuir los riesgos y el impacto visual que los actuales sistemas de recarga (como los postes eléctricos) tienen en el entorno, por el otro. Veamos en qué consisten cada uno de ellos:
- Carga inductiva: sistema de carga sin cables limpio, rápido, seguro y con múltiples beneficios que otras marcas como Huyndai o BMW también están probando actualmente. En el caso de la ELF de Mercedes-Benz, la parte inferior de la furgoneta-laboratorio está equipada con un sistema de carga inductiva basado en el principio de resonancia magnética, con una potencia de 11 kW en corriente alterna, equivalente a la de un Wallbox doméstico. Para iniciar la recarga, el vehículo simplemente se sitúa sobre una plataforma instalada en el suelo, y un campo electromagnético generado entre ambos permite transferir la energía sin cables ni contacto físico. Aunque aún presenta algunos retos —principalmente en términos de eficiencia energética y costes de instalación—, esta tecnología abre interesantes posibilidades para flotas urbanas, taxis autónomos, entornos residenciales y garajes inteligentes.
- Carga conductiva: sistema que utiliza placas de carga integradas en el suelo, que se comunican con el vehículo para indicarle la posición exacta en la que puede iniciar el proceso de electrorepostaje.
A diferencia de la carga inductiva, este sistema utiliza un conector físico directo situado en la parte inferior del vehículo, capaz de transferir energía a una potencia similar a la de un Wallbox doméstico (11 kW en CA).
Aunque aún requiere un posicionamiento muy preciso del vehículo, se perfila como una solución ideal para espacios reducidos o entornos donde la conexión con cable resulta poco segura.
Recarga robotizada: minimizar riesgos para aumentar la seguridad del usuario
El Mercedes-Benz ELF también trabaja en la recarga robotizada, es decir, la aplicación de sistemas automáticos, muy precisos y seguros, para sustituir la conexión manual que deben realizar los conductores de vehículos eléctricos. De este modo, se reducen los riesgos asociados a la manipulación de cables durante la recarga de vehículos con sistemas ultrarrápidos, ya que conectar físicamente cables que transmiten corrientes muy elevadas puede comportar ciertos peligros.
Esta tecnología podría resultar especialmente interesante para flotas de vehículos de baterías, entornos industriales y segmentos premium, entre otros, donde la eficiencia, la seguridad y la automatización son factores clave.
La ‘cuenta de energía virtual’: reaprovechar la electricidad generada en casa
Otra innovadora y revolucionaria idea asociada al concepto de carga bidireccional que Mercedes-Benz está explorando es la creación de una cuenta energética virtual. Funcionaría de la siguiente manera: la energía solar generada en el hogar mediante paneles fotovoltaicos, junto con la almacenada en el propio vehículo, permitiría a los clientes acumular “un crédito energético” en una cuenta virtual que podría utilizar más adelante, tanto en su vivienda como en las estaciones públicas de carga de la marca alemana.
Esta solución podría reducir los costes eléctricos de sus usuarios y disminuir la sobrecarga de la red, aunque para ser viable requeriría un ecosistema cerrado y altamente integrado, compuesto por el triángulo vehículo–infraestructura–nube. En la actualidad, Mercedes-Benz ya ha sentado las bases para hacerlo posible gracias a su plataforma MB.CHARGE, y se ha comprometido a impulsar un marco regulatorio adecuado que permita el uso de la carga bidireccional con tecnología V2G.
Beneficios del Mercedes-Benz ELF
Para terminar, repasemos algunos de los beneficios que podría aportar este prototipo de estación de carga si llegara a implantarse primero en los modelos de la marca y, más adelante, en otros vehículos eléctricos:
- Creación de sistemas de carga ultrarrápida: de este modo, los clientes podrían recargar sus coches eléctricos en muy poco tiempo (menos de diez minutos) en las estaciones de carga de Mercedes-Benz, de forma muy parecida a los tiempos de repostaje actuales para los automóviles de combustión.
- Mayor flexibilidad en los trayectos: la recarga ultrarrápida es sinónimo de una mayor comodidad a la hora de viajar, permitiendo repostajes de mayor capacidad en menos tiempo.
- Reaprovechamiento de la energía y ahorro energético: gracias a la carga bidireccional (Vehículo-Casa, Vehículo-Red, Vehículo-Dispositivos), tanto en corriente alterna como continua, el vehículo podría abastecer una vivienda, un edificio o la red eléctrica, transformando el coche en un componente activo del sistema energético inteligente. Así, por ejemplo, un vehículo con una batería de 70-100 kWh podría proporcionar suministro eléctrico a una casa entre dos y cuatro días en caso de apagón y permitir un ahorro de hasta 500 euros anuales gracias a la gestión inteligente de la energía. El año que viene Mercedes-Benz llevará los primeros servicios V2G a Francia, Alemania y Reino Unido con los nuevos modelos CLA y GLC, que ya están listos técnicamente.
- Integración de tecnologías innovadoras como la carga inductiva y la carga conductiva automatizada desde el suelo: gracias a ellas, se mejora la comodidad y seguridad del usuario, se reducen los cables, se disminuye el impacto visual y se potencia la accesibilidad en entornos urbanos o en aparcamientos complejos.
- Gestión inteligente de la energía para reducir la contaminación ambiental: el uso de energía eléctrica en lugar de combustibles fósiles, sumada a la generación de electricidad procedente de la energía solar, permite reducir la huella de carbono y contribuir a la descarbonización.
A modo de conclusión, en este artículo te hemos explicado qué es el Mercedes-Benz ELF, qué innovadoras tecnologías de carga incorpora y qué impacto podrían tener a corto y largo plazo en la movilidad eléctrica. Sin duda, se trata de un ejemplo muy interesante de cómo un vehículo eléctrico puede no solo consumir energía, sino también formar parte de un ecosistema de recarga energética más rápido, inteligente y sostenible. ¿Marcará Mercedes-Benz el futuro de la electromovilidad?



